Este día era justo lo que necesitaba, un poco de aire nuevo, música y lluvia.
BOOM! la inspiración llego y por fin pude volver a hacer lo que tanto me gusta y hace mucho no hacia, dibujar algo y escribir.
Solo 5 minutos necesite y fui feliz, muy feliz.
Podria escucharla 100 veces mas hoy!
Cuándo la esperanza rozó tus ojos, no supiste más que bailar bajo aquella mañana soleada. Sonriendo a todo y a todos, eras feliz, dicen que la felicidad no es eterna y que son esos pequeños momentos, pues aquél era uno de ellos.
No pasaba nada, todo seguía igual, seguías siendo pobre, tu madre había superado el cáncer, tenías los amigos más maravillosas del mundo, seguías amando y discutiendo con tu padre por todo. Te dedicabas a lo que supuestamente te gustaba sin cobrar un centavo, a veces.
Seguías igual de bipolar, haciendo la dieta de la piña durante dos días y alimentándote de mierda industrial el resto de la semana, estabas loca, más todavía, con ganas de viajar, ganas de conocer y ganas de ser.
A veces te daba por bailar y saltar a lo Heidi por la ciudad, y la gente te miraba con esas caras raras y seguro que pensando “de dónde mierda salio esta?”, pero bueno tú eras feliz. Estabas pensando en hacerte rastas, o volverte gotic-punk o hippie o bohemia, pero decidiste serlo todo en uno, en realidad eras todo en uno, porque no ser lo que amas? Y tú lo amabas todo…
Decidiste ser cada día alguien distinto, pero siempre siendo tú, querías hacer cosas diferentes y conocer gente diferente, querías que otra etapa de tu vida comenzara y sabías que en poco tiempo todo cambiaría.
Poco a poco ibas controlando tus cambios de humor y tus diversos e insospechados estados de ánimo, poco a poco te ibas volviendo más estable e ibas disfrutando un poco más del Sol, de la gente, de la música, del arte, de la comida, de tu padres, de la vida…
LOVE. ♥
